Yo se que nada puedo hacer
Para que vuelvas, y que
debo vivir hacia delante.
Sin embargo, no puedo olvidarte.
Estuve dispuesto
a renunciar a todas
por vos.
Gustoso, solo por vos.
Pero no se dió.
Probaste ser
acero frío, y helado.
Y tus palabras
solo eso.
Hoy nada me alcanza
porque todo lo que quiero
aquello que yo deseo
se llama vos.
Como olvidar tu boca,
tu piel, el primer beso?
Imposible.
Si nada jamás fue parecido.
No antes, no despues.
Desde aquel primer beso
tu ser narcótico
con esa fuerza hipnótica
se apoderó de mí.
Pero mas tarde
tu mente lunática
me dijo chau
se quiso ir.
